Se trata de un nuevo establecimiento educativo con orientación en informática, con capacidad para 180 alumnos. “El nuevo nombre de la justicia social es la educación”, destacó el gobernador Juan Schiaretti.

El gobernador, Juan Schiaretti, inauguró este sábado el nuevo edificio de la escuela ProA en la ciudad de Laboulaye, departamento Presidente Roque Sáenz Peña.

“Estamos inaugurando una escuela ProA que significa la  entrada al futuro de Laboulaye y de la región,  porque estas escuelas son las que enseñan la especialidad en informática y en biotecnología a nuestras chicas y chicos del secundario”, inició Schiaretti.

El mandatario estuvo acompañado por el intendente, César Abdala; los ministros de Educación, Walter Grahovac; de Justicia y Derechos Humanos, Julián López; de Agricultura y Ganadería, Sergio Busso; y las legisladoras Patricia de Ferrari y Victoria Busso.

El nuevo establecimiento educativo cuenta con orientación en Informática, y tiene una capacidad para 180 alumnos.

Esta es la segunda escuela ProA que estamos habilitando; la primera fue en Río Cuarto y la segunda en Laboulaye. Y lo más importante es que a partir de la semana que viene, los chicos se trasladan y pueden utilizar este edificio”, enfatizó el mandatario.

En el marco de la revolución científico-técnica actual, el Gobierno provincial en 2014 puso en marcha y desarrolló las escuelas ProA (Programa Avanzado de Educación Secundaria con énfasis en las Tecnologías de la Información y la Comunicación –TIC–).

Al respecto, el gobernador señaló que esta propuesta educativa “tiene otro esquema organizativo, y la gran ventaja es que, además de hacer entrar a nuestros jóvenes a la revolución científico-técnico, los prepara para que cuando salgan puedan seguir estudiando y trabajando”.

En estos establecimientos, los estudiantes adquieren conocimientos tecnológicos esenciales para su rápida inserción laboral, acordes a las demandas sociales y a lo que el mercado de trabajo exige. Constituyen un nuevo modelo de escuela, que vincula la cultura escolar con las culturas juveniles a través del uso de las nuevas tecnologías.

Ofrecen dos orientaciones: desarrollo de software y biotecnología en las regiones productivas.

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