Marcelino Estefanía, responsable de este espacio solidario de Río Cuarto, dijo que mucha gente se acerca a pedir ayuda ante la crisis económica. Diariamente preparan unas 400 viandas para personas en situación de calle.

En diálogo con CÓRDOBA HOY, Estefanía remarcó que antes acudía al Hogar gente que no tenía trabajo, pero desde hace un tiempo también concurren familias que tienen algún ingreso, pero que de todos modos ya no les alcanza para nada.

Sostuvo que “se ha acrecentado la cantidad de familias con necesidades de acceder a los alimentos”, y agregó: “La mayoría de las personas que vienen a retirar alimentos son mujeres que tienen niños a cargo”.

Desde hace 28 años este Hogar María Madre de Dios brinda ayuda y asiste a cientos de personas. Esto se sostiene gracias al empuje y compromiso de mucha gente como Marcelino que aportan su granito de arena para mantener este espacio en Río Cuarto.

Cuando el frío golpea fuerte a las personas sin techo o cuando no hay posibilidades de acceder al plato de comida, el Hogar María Madre de Dios siempre tiene las puertas abiertas para dar una mano a quienes más lo necesitan.

Son alrededor de 50 personas las que se van turnando para preparar las viandas, algunas limpian las verduras, otras ayudan a buscar donaciones y también hay un equipo de cocineras. Marcelino dijo que esto es posible gracias al aporte de la sociedad riocuartense que colabora y ayuda para que todos los días esas personas que concurren al Hogar puedan acceder a su plato de comida.

Señaló que en los últimos años se observa que “las personas llegan más golpeadas al Hogar”. Sostuvo que lo más preocupante es que muchos “son jóvenes y con problemas de adicciones”. Remarcó que esto hace que todo sea más complejo porque es difícil que estas personas puedan ser reinsertadas en el ámbito social sin que reciban una ayuda más integral vinculada a su salud.

Remarcó que en el lugar también funciona una especie de roperito comunitario, en donde se junta la ropa donada por la gente y se reparte a las personas que les hace falta. Además, armaron un taller de costura para arreglar aquellas prendas que tienen algún detalle.

En otro sector, el Hogar también tiene una huerta comunitaria en donde las personas que reciben ayuda realizan dos horas de trabajo diarias y además un bolsón con mercadería que se junta de los aportes de los riocuartenses.

Marcelino manifestó que además de generar alimentos como las frutas y verduras, “la huerta sirve para que la gente valore la ayuda que recibe y también aprenda a tomar responsabilidades, cumplir y respetar lo que se hace desde el Hogar”, afirmó.

Por último, Estefanía remarcó que, si bien siempre hace falta más ayuda porque la situación económica y social es complicada, es enorme la colaboración de la gente de Río Cuarto y expresó su agradecimiento por el permanente apoyo.

¿Cómo colaborar?

Las personas interesadas en colaborar pueden escribir por WahtsApp o llamar a Marcelino Estefanía al +54 9 3585 14-3894. Se puede ayudar con alimentos, ropa, abrigos, colchones, etc.

¡Viralizalo!