Además, se aprobó la declaración de persona non-grata a diputados que acompañaron la decisión del Gobierno de Javier Milei.
Estudiantes, docentes y trabajadores nodocentes de la Universidad Nacional de Río Cuarto realizaron una asamblea interclaustro en la cual se definieron acciones en defensa de las universidades, tras el veto de Javier Milei a la Ley de Financiamiento y el acompañamiento del Congreso a esta medida. Lo más importante de la jornada tuvo que ver con la aprobación del rechazo a la toma de la Universidad.
Al grito de «no se toma», estudiantes de la casa de altos estudios se posicionaron fervientemente en contra de las medidas de fuerza que se llevan adelante en otras universidades del país.
La mayoría de los estudiantes que se expresaron en la Asamblea esquivaron la posibilidad de iniciar una toma en las facultades de la casa de altos estudios. Al respecto, desde Franja Morada señalaron que se debe trabajar en alternativas que permitan seguir en pie de lucha, pero sin afectar el funcionamiento de la institución.
Mientras los trabajadores se manifiestan a favor de realizar un nuevo paro el próximo jueves -como en el resto del país-, el gremio estudiantil en la casa de altos estudios local (la Federación Universitaria de Río Cuarto) lanzó un mensaje pidiendo que las medidas de fuerza avancen sin afectar el dictado de clases. “Sí a los estudiantes en las aulas”, expresaron desde la FURC.
“En el contexto actual de movilizaciones, entendemos que las tomas no son la solución del conflicto”, ratificaron desde el gremio que lidera Dinámica Estudiantil, con Valentín Caglieri a la cabeza.
Otra de las definiciones de la jornada, que contó con una fuerte participación de estudiantes, tuvo que ver con declarar persona non-grata a los diputados que la semana pasada acompañaron el veto cuando fue tratado en el Congreso de la Nación. De esta manera, se expresó el repudio a figuras como la de la riocuartense Belén Avico.
Además, hubo repudio a las amenazas del jefe de Gabinete nacional, Guillermo Francos, quien desalentó las tomas expresando que “en la década del ’70 también se tomaban universidades”, comparando la actualidad con lo que denominó “la guerrilla subversiva”.
Por otro lado, aclararon: “Reafirmamos nuestro compromiso inquebrantable con la Educación Pública, Gratuita y de Calidad. Nuestro objetivo es claro: aulas llenas, docentes trabajando con dignidad y salario justo”. El mensaje fue tomado por la comunidad universitaria como un paso atrás en el plan de lucha que tiene a las universidades de todo el país atravesadas por tomas de estudiantes que resisten al embate del Gobierno. Todo indica que ese no es el caso de Río Cuarto, más allá de que otras agrupaciones estudiantiles piden profundizar en las acciones de protesta.