El desafío es obtener datos objetivos sobre la situación ambiental, detectar posibles impactos en la salud de la población y relevar el comportamiento de los vecinos en relación al cuidado del medio ambiente.
Esta propuesta de trabajo es desarrollada por un grupo interdisciplinario de docentes, investigadores, becarios y estudiantes de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de Río Cuarto, en el marco del Desafío Nº 65: “Diseño y ejecución de monitoreo ambiental para la localidad de Canals”, correspondiente al programa ImpaCT.AR, impulsado por el Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación. Esta propuesta implica una inversión de $4.943.500 aportados por el Gobierno nacional.
El programa ImpaCT.AR tiene el propósito de promover proyectos de investigación y desarrollo que brinden apoyo a organismos públicos en la búsqueda de soluciones a desafíos de interés público. En este marco, la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Municipalidad de Canals presentó una problemática ambiental, social y de salud, y la UNRC asumió la responsabilidad de brindar respuestas, a partir del trabajo de este grupo de investigación de la Facultad.
Previo a la pandemia, la Municipalidad de Canals recurrió a la UNRC para que se evaluaran las fuentes de contaminación ambiental de la localidad. Dicho trabajo fue realizado por investigadores de nuestra Facultad. A raíz de ese trabajo, docentes investigadores que participaron de ese estudio y la Secretaría de Extensión de Exactas le propusieron a la Municipalidad de Canals que presentara un proyecto en la convocatoria del programa ImpaCT.AR para darle continuidad a la problemática en aspectos que antes no habían sido abordados, principalmente, por una cuestión presupuestaria. Así fue como Canals presentó la problemática y la UNRC se presentó como equipo científico destinado a brindar una solución al desafío planteado por el municipio.
En la presentación, el Gobierno de Canals indicó que en la población existen conflictos a causa de las contaminaciones ambientales. Y señaló que la ausencia de datos objetivos sobre fuentes de contaminación, impacto y relación con la salud pública lleva a subjetividades que originan problemas al momento de tomar decisiones respecto del ambiente.
El Dr. Arnaldo Soltermann, docente investigador y coordinador del equipo de científicos de la UNRC, dijo que, con el propósito de dar respuesta a esta demanda, el trabajo abarca tres actividades principales: un plan de monitoreo ambiental, el plan educación ambiental y la encuesta sobre salud y ambiente a los vecinos.
Encuesta sobre salud y ambiente
El docente e investigador comentó que desde marzo están trabajando y manifestó que ya terminaron con el diseño de la encuesta, instrumento de recolección de datos que se utilizará para conocer aspectos de la salud que podrían estar relacionados con las condiciones del ambiente.
Las encuestas a los vecinos de Canals serán realizadas durante un día o dos, en caso de ser necesario, en el mes de octubre por unos 25 estudiantes de distintas carreras de la Facultad de Ciencias Exactas, quienes además de la formación académica recibida participarán de instancias de capacitación que se desarrollarán específicamente para su tarea como encuestadores. Por dicha labor, además de sumar experiencia y recibir capacitación sobre la temática, los estudiantes resultarán beneficiarios de una beca de extensión rentada.
Soltermann precisó que las encuestas servirán para conocer sobre la existencia de patologías habitualmente asociadas a procesos de contaminación, sobre hábitos personales y exposiciones a situaciones de riesgo, incluyendo las laborales, que facilitan el desarrollo de estas patologías.
Monitoreo y educación ambiental
Respecto al diseño y ejecución de un sistema de monitoreo ambiental, explicó que esta labor requerirá de un arduo trabajo de los investigadores, quienes deberán realizar muestreos y ensayos para lo cual deberán movilizar equipamiento a la localidad, mientras que otros estudios se concretarán en los laboratorios de la UNRC. También contó que hay ciertos estudios que serán tercerizados y por eso la necesidad de contar con dicho presupuesto.
Por otra parte, indicó que en aquellos primeros estudios realizados por los científicos habían advertido algunos problemas vinculados a las conductas de las personas que tenían que ver con la “naturalización de la convivencia con sustancias fitosanitarias, algunas de ellas de alto riesgo”. Por tales motivos, uno de los grandes desafíos de este trabajo es elaborar un plan de educación ambiental.
Respecto a esta actividad, Soltermann adelantó que la semana que viene el equipo de trabajo se reunirá, en el marco de una mesa consultiva, con integrantes de instituciones educativas de la localidad para comenzar a elaborar la propuesta que se implementará en Canals. Señaló que esta iniciativa se deberá institucionalizar a partir de incorporarse en la educación formal.
Remarcó que en esta actividad “es fundamental la participación de las instituciones educativas y de la comunidad en general para que las cuestiones ambientales tengan presencia y llegada a los hogares canalsense”. Consideró que para tener éxito “es muy importante que el vecino se preocupe y ocupe de todo lo relacionado con el cuidado del medio ambiente”.
En este marco, la idea es organizar diferentes eventos como charlas, contar con invitados especiales, elaborar contenidos audiovisuales y generar espacios de capacitación y debate sobre la temática.
En el plano educativo, también articularán acciones con el Instituto Provincial de Educación Técnica (I.P.E.T) para que los propios alumnos puedan crear sensores de partículas y establecer sistemas de monitoreos creados por los propios estudiantes. Aclaró que esto no quita que las mediciones oficiales se realicen aparte por equipos homologados por los organismos nacionales, sino que la idea es involucrar fuertemente a los alumnos para que se ocupen y preocupen por la temática.
De esta manera, unos 20 docentes, investigadores y becarios de los diferentes departamentos de la Facultad llevarán a cabo este programa durante tres años, con el objetivo de obtener datos concretos y arribar a conclusiones sobre la situación ambiental en la localidad. La idea es que dicho conocimiento sea de utilidad para que el Gobierno de Canals pueda tomar decisiones o implementar políticas públicas que impacten positivamente en la comunidad y el medio ambiente.
