El estacionamiento medido en Río Cuarto cuesta $600 la hora, mientras que en Córdoba capital vale $360. En otras ciudades como San Francisco cuesta $400 y en Villa María $360.
Desde la Unión de Usuario y Consumidores de la provincia de Córdoba se realizó un monitoreo de tarifas de estacionamiento medido. Del mismo se desprende que la ciudad de Río Cuarto es la más cara dentro de las relevadas de la provincia.
En declaraciones al programa radial NADA FAKE, Martín Villanueva, referente de La Unión de Usuarios y Consumidores local informó que Río Cuarto tiene estacionamiento medido a 600 pesos la hora y es el más caro de la provincia de Córdoba.
Mientras que en San Francisco cuesta $400 pesos, Córdoba Capital $360, Villa María $360, Carlos Paz $250, Río Tercero $200 y en Bell Ville $110, según el relevamiento realizado por la Unión de Usuarios y Consumidores entre el 5 y el 11 de noviembre.
El relevamiento revela además que en ciudades como Villa Allende se aplica una tolerancia de una hora, en Alta Gracia el pago es voluntario, y en La Calera el sistema de estacionamiento medido está suspendido. Esta diversidad de enfoques contrasta con el caso de Río Cuarto, donde el sistema está concesionado a la empresa Desarrollo del Sur Sociedad del Estado, a diferencia de otras ciudades donde el estacionamiento es gestionado directamente por los municipios.
Martín Villanueva, vocero de la Unión de Usuarios y Consumidores en Río Cuarto, expresó su preocupación por la marcada diferencia en el costo entre Río Cuarto y el resto de las ciudades, incluida Córdoba capital, que presenta un volumen de tránsito mucho mayor. “Es llamativo que Río Cuarto, siendo la capital alterna, tenga un costo tan alto de estacionamiento en comparación con Córdoba y otras localidades”, señaló Villanueva.
El alto costo del estacionamiento en el centro de Río Cuarto no solo afecta el bolsillo de los usuarios, sino que también agrava el problema de la congestión en horas pico, especialmente en las áreas comerciales y administrativas. La falta de opciones de estacionamiento asequibles contribuye al aumento del tránsito en busca de lugares libres y genera embotellamientos en arterias clave de la ciudad, lo cual es un problema recurrente en horarios laborales y escolares.
En este marco, el arquitecto Martín Villanueva consideró que no se puede solucionar el tema del tránsito sancionando con una tarifa desmedida a los usuarios, «hay que buscar alternativas más creativas», concluyó.