Fotos: Gentileza de Eugenio Agostini

En las horas previas a cumplir 52 años, la UNRC invistió como Doctor Honoris Causa a Alberto Taquini (h), creador del plan Nuevas Universidades. La iniciativa de este reconocimiento fue impulsado por la Facultad de Ciencias Económicas.

El acto en homenaje a quien generó la iniciativa de la cual surgió la Universidad Nacional de Río Cuarto tuvo lugar en el aula mayor y comenzó poco después de las 11.

Taquini expresó su agradecimiento por haber recibido la máxima distinción que otorga la casa de estudios y recibió muestras de afecto una y otra vez, tanto mediante aplausos cuanto a través del discurso de Guillermo Mana, decano de Ciencias Económicas, facultad que propuso el homenaje.

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La ceremonia fue presidida por el rector de la UNRC, Roberto Rovere. Además de Alberto Carlos Taquini, lo acompañaron en el estrado el vicerrector, Jorge González; los decanos de Ciencias Económicas, Guillermo Mana; Ciencias Humanas, Fabio Dandrea, y Agronomía y Veterinaria, Carmen Cholaky, y  la secretaria de Posgrado de Ciencias Exactas, Daniela Gómez.

Además en la primera fila de las butacas del aula mayor estuvieron presentes la rectora y la vicerrectora electas, Marisa Rovera y Nora Bianconi, junto a diversas autoridades del Rectorado y de las facultades.

Tras el Himno Nacional Argentino se procedió a la lectura de salutaciones, entre ellas de Jaime Perczyk, ministro de Educación de la Nación; Oscar Alpa, secretario de Políticas Universitarias, y Adolfo Uriona, obispo diocesano de Río Cuarto.

En su mensaje, grabado y transmitido como el resto del acto por UniRío TV, Perczyk agradeció a “alguien que hizo tanto por la universidad argentina”. Carlos Greco, presidente del Consejo Interuniversitario Nacional, aseveró que Taquini es “una referencia” y constituye “un gran ejemplo”.

A continuación, la presidente y vicepresidente de la Comisión Fundadora de la UNRC, Ana Vasquetto y Susana Mussolini, le entregaron una plaqueta a Taquini, momentos previos a la lectura de la resolución 446/22 del Consejo Superior de la casa de estudios, que establece la investidura para el autor del plan Nuevas Universidades.

Por su parte, en el punto culminante de la ceremonia el rector Roberto Rovere hizo entrega a Alberto Taquini (h) del título de Doctor Honoris Causa de la UNRC como así también de una copia original de la resolución que lo designa, a lo cual se sumó a manera de obsequió libros de la colección Juan Filloy publicados por la UniRío Editora.  

Conferencia del doctor Taquini

En lo que  fue uno de los momentos centrales de la ceremonia tuvo lugar la conferencia a cargo del Alberto Taquini (h), quien visiblemente emocionado inició sus palabras diciendo: “Cuando me estaba preparando para este acto sentí una fuertes ganas de seguir para adelante por eso en estas palabras si bien voy a repasar cosas del pasado también vamos hablar sobre los nuevos caminos que entiendo tiene que tomar la educación por las grandes transformaciones  que ha tenido la sociedad”.

Y agregó: “Muchas gracias por esta distinción que me compromete aún más con esta querida casa de estudios y con esta ciudad. Estoy caminando los pasos finales de mi vida  hacia el misterioso encuentro con Dios, es un camino en que me  fui entregando  casi enteramente a la vida académica, muchas veces quitándole a los míos muchas horas, que la familia, célula de la sociedad, solicita”.

“Entiendo que miles de alumnos se han recibido  en las universidades que fueron creadas por nuestro plan, lo cual compensa mi  espíritu y me llena de satisfacción”.

“Gracias a la Universidad y a todo Río Cuarto porque hemos caminado durante 54 años para transformar la universidad argentina y con ello también se logró transformar la vida de las ciudades en que ellas viven”.

Agradeció al equipo de trabajo que “me acompañaron durante estos años” dentro de los cuales tuvo especiales palabras para Sadí Rife, primer rector de la UNRC,  a quien reconoció como un gran ejecutor del Plan Taquini en los tres primeros años de creaciones de universidades nacionales.

También agradeció “a la Comisión Pro Universidad con la presidencia del ingeniero Luchini y con Víctor Yoma incansable luchador durante más de 50 años,  Jorge Harriague cotidiano compañero de años, el doctor Martorelli quien registró cotidianamente el acontecer de la Comisión”.

Agregó que “el Plan de Nuevas Universidades tenía el objetivo de descentralizar y de algún modo interpretó la necesidad de la sociedad del momento desde donde se generaron múltiples actores en todo el país para imponer la demanda de nuevas universidades”.

Destacó que con este Plan “en muchas ciudades del interior del país se iniciaron las  actividades de la investigación científica y desde allí comenzaron a crecer,  la UNRC  es ya  una de las 4 ó 5 universidades nacionales que  figura en el índice internacional de calidad científica”.

Subrayó que “también las universidades representan una gran inversión pública, la UNRC representa un presupuesto este año del orden de los 20 millones de dólares”.

Mirando al futuro

En la continuidad de la conferencia Taquini  expresó que “hasta aquí he hecho un pequeño repaso vinculado a la creación de universidades pero ahora los invito a mirar al futuro y preguntarnos para qué sociedad estamos educando, es la misma sociedad que teníamos hace 50 años, es la misma la Argentina en el mundo qué hace 50 años,  es la misma tecnología, creo que en este sentido todos los actores sociales tendríamos que cambiar en función de la trasformación que ha tenido el mundo”.

Reflexionó  que “las universidades como el mundo están atravesadas por la globalización y las tecnologías digitales, cambios que imponen a los distintos niveles educativos, incluidas  las universidades, un replanteo curricular que permita dar la adecuada formación a las nuevas generaciones”.

“Hoy el requerimiento de la sociedad del conocimiento nos llama la atención sobre cuáles son los principales recursos disponibles en los nuevos escenarios que emanan de la formación integral de las personas”.

Y dijo: “La tecnología ha influido siempre en la educación, en cada momento histórico hemos tenido una tecnología predominante,  el libro fue el alma de la educación cuando apareció masivamente a principios del siglo XX, luego aparecieron la electrónica y las comunicaciones y nos traen hasta el presente el desafío de ellas”.

Sostuvo: “Hace más de 30 años que vengo  trabajando para la incorporación de Internet, la nube y la inteligencia artificial en el aprendizaje de niños y jóvenes. En el 2001 en la Academia Nacional de Educación presenté  un trabajo donde planteaba que la universidad  pública debía transformarse teniendo en cuenta esta nueva realidad, decíamos entonces que pronto tendríamos la virtualidad, graduados de la virtualidad a partir de las tecnologías digitales y multimedias”.

Dijo: “Ahora creo que tenemos que innovar, creo que en el ámbito educativo debemos decir  tenemos que cambiar el mundo, vayamos por nuevos caminos, el parate mundial  que provocó la pandemia produjo  grandes cambios  en la familia y en la sociedad a lo que se resiste la inercia social, la educación no escapa a esta situación, pese a que en todo el  mundo la virtualidad y la tecnología entró por la ventana como un tsunami en la vida de todos”.

“Este cambio requiere transformaciones que habiliten ya diversas formas de enseñar y aprender, capaces de valorar nuevos modelos, principios disruptivos, donde se optimicen esos aprendizajes, creo que llegó el momento donde las universidades tiene que barajar y dar de nuevo como en el truco”.

Muestra de este gran cambio tecnológico es que “hay más celulares inteligentes que personas  y cada año los teléfonos celulares son más inteligentes todavía”.

Por otra parte señaló que “hace un tiempo comparte el impacto de las tecnologías de inteligencia artificial, su impacto en el mundo del aprendizaje, hoy  a medida que la tecnología sigue avanzando a ritmo vertiginoso la inteligencia artificial es una herramienta clave en el transformación del sistema educativo”.

“Se trata de una tecnología de gran magnitud que cambia drásticamente la vida y por cierto la educación, se trata de una nueva magnitud en la forma de acceder al aprendizaje que modifica totalmente el actual sistema educativo tanto para las instituciones, como para los docentes y los alumnos, es verdad que todavía no sabemos que forma tomará este cambio pero no estamos lejos de que esta tecnología asuma un papel protagónico en cualquier proceso de aprendizaje”.

Explicó que “un hito importante es el chatgpt 4, un modelo que nos permite acceder a información por medio de la inteligencia artificial, un sistema que nos permite “dialogar” con la máquina en la nube mediante  preguntas y respuestas. Muestra de su vitalidad es que el chatgpt 4 tiene unos 6 meses, en el primer mes incorporó 100 millones de usuarios, en enero se sumaban 10 millones de personas por día, y es altamente probable que haya más de mil millones de personas que usan este sistema en el mundo”.

Agregó que “la inteligencia artificial modifica los métodos y las formas de la educación y  permite un acceso masivo a cantidades superiores  de información disponible, es un recurso que va a cambiar no solo la enseñanza sino el ejercicio de la profesiones también”.

“La inteligencia artificial nos llevará a pensar en cambios en los contenidos, en las estrategias, en el rol del alumno, en el rol del docente, será como un nuevo juego donde la virtualidad cambiará nuestras formas de acceso físico al mundo del conocimiento”.

“Todos estos cambios en la relación tecnología-educación son nuevos desafíos para la universidad argentina, no podemos cruzarnos de brazos ante esta revolución en marcha, por el contrario seamos los pioneros, vamos hacia una nueva  educación  y la respuesta está en vuestras manos”, expresó.

Y concluyó diciendo: “Con estas palabras como hace 54 años, en este lugar que tanto quiero, vuelvo a poner  en escena los requerimientos que tiene la universidad para estar a la altura de las realidades de este tiempo”.

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