La entidad envió un documento a la Legislatura provincial con propuestas para limitar los incrementos y exigir mayor transparencia en el uso de los fondos recaudados.
La Sociedad Rural de Río Cuarto presentó a los jefes de todos los bloques legislativos de Córdoba un documento con propuestas surgidas de la última Asamblea de productores agropecuarios, en la que se manifestó un fuerte rechazo a los aumentos del Impuesto Inmobiliario Rural. El pedido central es que los incrementos para 2025 no superen el índice de inflación del año anterior y que se garantice un mayor control sobre el destino de los fondos recaudados.
En la carta dirigida a los legisladores, la entidad ruralista remarcó la necesidad de que la normativa vigente se modifique para evitar aumentos «desorbitados» en el tributo que grava las tierras rurales. Entre las propuestas presentadas, se solicita que se restituya el beneficio del 10% por pago en cuota única y que las actualizaciones impositivas se basen en la variación promedio de los precios agropecuarios.
Otro de los puntos clave del reclamo es la exigencia de auditoría y transparencia en el uso del dinero recaudado dentro del Fideicomiso para el Desarrollo Agropecuario (FDA), el fondo que financia obras y compras destinadas al sector. En este sentido, los productores piden que se informe periódicamente sobre las acciones realizadas con dichos recursos y sus costos.
Además, la Rural de Río Cuarto insistió en que, a partir de 2026, el sector agropecuario tenga participación activa en la discusión de futuros ajustes del impuesto antes de su tratamiento en la Legislatura provincial. También reclamaron que aquellos contribuyentes que ya hayan abonado el tributo de 2025 puedan utilizar el excedente derivado de posibles modificaciones como saldo a favor en futuros pagos.
Con esta presentación, los productores buscan abrir un canal de diálogo con los legisladores para frenar lo que consideran un impacto económico negativo en el sector y garantizar reglas claras y equitativas en materia impositiva.
