El presidente estadounidense brindó un fuerte respaldo a Javier Milei durante un almuerzo en la Casa Blanca. También expresó su preocupación por posibles acuerdos militares entre Argentina y China.
En un nuevo encuentro en la Casa Blanca, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, manifestó un apoyo explícito a su par argentino, Javier Milei, y advirtió que “si Milei no gana las elecciones, no seremos generosos con Argentina”.
El mandatario norteamericano afirmó que la próxima elección en el país “está siendo mirada por el mundo” y consideró “muy importante saber quién va a ganar, si será un socialista o no”. Según expresó, una eventual derrota de Milei sería “un retroceso” y aseguró que el otro posible candidato para 2027 “es un comunista de la extrema izquierda responsable de llevar al país a este problema en primer lugar”.
Durante el almuerzo, Milei agradeció el respaldo del gobierno estadounidense y destacó la colaboración del secretario del Tesoro, Scott Bessent, para “superar el problema de liquidez” que atraviesa Argentina. “Agradezco el apoyo por el mundo libre, frente a la amenaza del socialismo del siglo XXI”, señaló el presidente argentino.
Trump también aprovechó la ocasión para marcar su postura frente a las relaciones internacionales de Argentina. “Me disgustaría que hicieran algo con las Fuerzas Armadas de China. Quisiera que no hicieran nada con China”, dijo en referencia a posibles acuerdos militares con el gigante asiático.
El encuentro comenzó alrededor de las 14.30 (hora argentina), cuando Milei ingresó a la Casa Blanca y fue recibido por Trump con un apretón de manos y una foto conjunta. No hubo reunión bilateral formal, pero sí un almuerzo de trabajo entre ambas comitivas.
Luego, el mandatario argentino tenía previsto participar de una ceremonia en homenaje al activista estadounidense Charlie Kirk, asesinado el 10 de septiembre en Utah, y regresar al país en horas de la noche.
El apoyo público de Trump se suma a una serie de gestos políticos y económicos que refuerzan la sintonía entre ambos gobiernos, en medio de un escenario internacional marcado por tensiones con China y el debate interno en Argentina sobre el rumbo económico y político del país.