El proyecto enviado por el ejecutivo municipal contó con los 10 votos de los concejales oficialistas, mientras que los representantes de Juntos por Río Cuarto votaron en contra y los ediles de PAIS se abstuvieron.
En una extensa sesión, al bloque de Hacemos por Córdoba le alcanzó con los votos propios para lograr la aprobación del pliego y permitir que el Gobierno de Río Cuarto avance con el llamado a licitación, por primera vez en la historia de Río Cuarto, del servicio de transporte público de pasajeros.
Con varias críticas y luego de brindar una conferencia de prensa para dejar bien en claro su postura, la primera minoría de la oposición, representada por el bloque de Juntos por Río Cuarto, votó en contra. La bancada liderada por Pablo Carrizo se abstuvo de votar, lo cual permitió que con los votos oficialistas se aprobara el pliego licitatorio.
El concejal Pablo Carrizo, presidente del bloque País, esgrimió que se abstuvieron de votar al considerar que el pliego contiene muchos errores, no brinda la oportunidad para que la ciudad pueda contar con un servicio público estatal y tampoco que se sumen otras empresas de Río Cuarto. “Está armado como para que la SAT vuelva a brindar el servicio durante 7 años”, aseguró Carrizo, quien agregó que “un transporte municipal hubiese permitido conocer los costos para definir el valor del boleto”.
Las críticas más fuertes vinieron de la primera minoría. “Lo que está haciendo el Gobierno de Llamosas es legalizar el recorte más grande de la historia del transporte urbano de pasajeros”, manifestó Gonzalo Parodi, presidente del bloque de Juntos por Río Cuarto, quien agregó que a partir de este pliego la empresa adjudicataria «tendrá en sus manos la absoluta decisión de hacer lo que quiera».
El referente de la oposición en el Concejo Deliberante dijo que el Estado municipal abandonó al ciudadano. “Vamos a pasar de tener un contrato, que es en una situación precaria, que exigía 23 líneas a un pliego que establece 14”, cuestionó el concejal quien señaló que con este pliego lo único que se hace es «legalizar el actual recorte de líneas».
Parodi lamentó que la ciudad «se perdió una oportunidad única de discutir verdaderamente el servicio de transporte urbano de pasajeros» y señaló que los aportes realizados en las audiencias no fueron tenidos en cuenta. «El pliego está hecho para que el Estado no se haga cargo de nada y para que la empresa adjudicataria tenga la mayor rentabilidad posible», expresó.
Pablo Benítez, representante del juecismo en Juntos por Río Cuarto, dijo que el voto negativo responde a que el proyecto no estable reglas claras para la prestación del servicio y manifestó que el Estado se desliga de sus responsabilidades para decidir cuestiones vinculadas a la frecuencia, cantidad de línea y recorridos para dejaras al criterio de la empresa que resulte adjudicataria.
“Recordemos que este es un servicio público y la potestad sobre su funcionamiento y control la debe tener el Estado municipal y no dejar a la empresa ciertas decisiones”, expresó el concejal.
El presidente del bloque de Hacemos por Córdoba, Guilllermo Natali, destacó que por primera vez en su historia la ciudad licitará el servicio de transporte público de pasajeros y rechazó las críticas de la oposición.
«La empresa que adquiera el pliego tiene que presentar un plan de recorridos, frecuencias y el pliego permite que eso sea modificado por la municipalidad. Después de que el servicio sea adjudicado el Municipio se reserva la posibilidad de la definición de las líneas. Estoy convencido que el servicio va a mejorar luego de este proceso», expresó Natali.
