Así lo expresó Nélida Ortiz, intendenta de Alpa Corral, en el marco de las recientes inundaciones en la localidad
La suma de milímetros de las actuales lluvias torrenciales de Córdoba produce consecuencias no siempre prevenibles. “Si llueve 200 milímetros en las sierras hay que prepararse para lo que se viene”, afirmó Ortiz. La ubicación próxima de la localidad en una zona medianamente “alta” de las sierras cordobesas dificulta las precauciones ante las posibles inundaciones.
Cabe destacar que, el pico máximo de la creciente en Alpa Corral superó los 4,5 metros. Lo que provocó en consecuencia, la evacuación y rescate de más de 30 personas por parte de los Bomberos Voluntarios de la localidad. Se estima que la creciente afectó a 59 domicilios particulares, más de 10 locales de venta y la sede de la Subcomisaría de la Policía de la provincia de Córdoba.
Con respecto a los daños de la localidad y las pérdidas materiales, la intendenta dijo que le han pedido ayuda al Gobierno de Córdoba para reparar y cubrir gastos. “Tenemos que comprar bombas, arreglar tableros… Ahora estamos con una bomba sustituta, pero es chica y necesitamos cubrir las necesidades de toda una comunidad”, precisó.
La última gran inundación de la localidad ocurrió en el año 2004. En el transcurso de ambas jornadas, el milimetraje de lluvia caída ascendió a los 230mm. Una vez descendido el cause del río, los Bomberos de la localidad procedieron a colaborar con los vecinos y comerciantes para el traslado de bienes muebles y pertenencias. A lo largo de la noche del miércoles, se continuó con el operativo de prevención monitoreando constantemente los niveles del río. Los cuales finalmente, descendieron.
