El jefe de Gabinete, Manuel Adorni, afirmó que la iniciativa ya está cerrada y que cualquier modificación se discutirá en el Congreso. También minimizó el rechazo de la CGT y la ausencia de representantes sindicales en la última reunión del Consejo de Mayo.
El jefe de Gabinete, Manuel Adorni, confirmó que el Gobierno no introducirá cambios en el proyecto de reforma laboral que enviará al Congreso. Señaló que el texto “está terminado” y que cualquier modificación “será parte del debate legislativo”, al referirse a los planteos de la Confederación General del Trabajo (CGT).
Adorni respondió así a las críticas gremiales y evitó vincularlas con la demora en la presentación formal del proyecto. “Es un tema estrictamente de la CGT”, sostuvo. Además, restó importancia a la ausencia del dirigente de la UOCRA, Gerardo Martínez, en la última ronda de diálogo. Explicó que el sindicalista no asistió por razones de agenda y recordó que en encuentros anteriores “el intercambio fue amistoso y constructivo”.
Las declaraciones se dieron tras el cierre de la última reunión del año del Consejo de Mayo, realizada en Casa Rosada. En esta oportunidad, no participaron representantes del sector sindical, un dato que profundiza las tensiones que venían creciendo desde la reunión previa, cuando Martínez cuestionó el enfoque general de la reforma laboral impulsada por la gestión de Javier Milei.
Pese a estas diferencias, el Gobierno avanzó y envió a los consejeros un borrador técnico del proyecto para que cada sector pueda revisarlo. Según Adorni, los lineamientos centrales ya están definidos y no se abrirá una instancia adicional de negociación previa al ingreso del texto en el Congreso.


