ATE y la CTA Autónoma encabezaron un acto en el Pasaje de la Reforma, en barrio Alberdi, donde se recordó la histórica rebelión de 1969 con una olla popular y un fuerte mensaje político.
Este jueves al mediodía, en una jornada fría pero soleada, se llevó a cabo un emotivo acto en la ciudad de Córdoba, en conmemoración del Cordobazo. La convocatoria fue realizada por ATE Córdoba y la Central de Trabajadores de la Argentina Autónoma (CTAA), acompañadas por diversas organizaciones sociales y estudiantiles.
La actividad central fue una olla popular, donde las y los asistentes compartieron un guiso de lentejas en un espacio cargado de memoria histórica. En ese sitio, más de un siglo atrás, estudiantes de la Universidad Nacional de Córdoba protagonizaron la Reforma Universitaria de 1918, y décadas después, fue escenario de las protestas que derivaron en el Cordobazo del 29 de mayo de 1969.
Federico Giuliani, secretario general de ATE Córdoba y de la CTAA, fue uno de los principales oradores del acto. En su discurso, destacó la importancia de recuperar la historia de lucha del movimiento obrero y estudiantil cordobés. “Esta es una continuidad de la resistencia popular. En 1969 los obreros mejor pagos del país salieron a la calle por mejores condiciones laborales y enfrentaron sin miedo a la represión”, señaló.
Además, Giuliani remarcó la necesidad de fortalecer la organización de los trabajadores en el contexto político actual: “Los poderosos no necesitan de la política porque controlan los medios, las corporaciones y el Congreso. Nosotros, los laburantes, sí necesitamos de la política para organizarnos y construir poder popular”.
Durante el acto también se hizo referencia a las políticas del gobierno nacional. Giuliani criticó duramente al presidente Javier Milei, a quien acusó de representar intereses extranjeros y de “poner la patria en venta”. Recordó que “fue en Córdoba donde Milei fue repudiado por primera vez desde que asumió”, señalando que hay sectores sindicales, populares, ambientales y culturales dispuestos a enfrentar sus medidas.
La jornada concluyó con un llamado a continuar organizándose en unidad: “Debemos exigir la reincorporación de los despedidos, mejores salarios y terminar con el hambre. Esta asamblea es para recordar, pero sobre todo para accionar”, afirmó el dirigente.
El acto en el Pasaje de la Reforma fue una muestra de cómo las luchas del pasado siguen presentes en las movilizaciones actuales, en defensa de los derechos y de la dignidad del pueblo trabajador.