La legisladora indicó que no se trata de un conflicto económico y que, a larga, el veto a la Ley de Financiamiento Universitario representará un problema para el Gobierno. «No hay peor cosa que cuando la soberbia se apodera de quien está en el poder», dispara la diputada que se mueve con autonomía en el Congreso.
“La universidad es parte de nuestra historia, de nuestra identidad como nación. Es el presente y el futuro del país y un orgullo de las y los argentinas y argentinos. No vamos a permitir que se destruya”, las líneas finales del documento que publicó en la tarde de este miércoles, con el veto ya ratificado, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN).
Pasadas las 15 horas del miércoles, la votación en la Cámara Baja terminó con 160 votos positivos, 84 negativos y cinco abstenciones (que resultaron determinantes). Milei doblegó nuevamente la razón del Congreso, contando apenas con una minoría legislativa, y con la asistencia esencial del PRO y parte de la UCR. La Ley de Financiamiento Universitario no logró reunir los dos tercios para evitar el ajuste sobre el sistema universitario nacional. ¿Se trata de una victoria sin dobleces para el oficialismo? Es una pregunta que da para pensar.
“Como dijeron algunos diputados hoy en el recinto: el Gobierno va a perder. Puede haber ganado hoy con el sostenimiento del veto, pero va a perder a la larga. La sociedad no va a dejar pasar esta jornada», dijo Natalia de la Sota en Radio Universidad de Córdoba, haciendo una lectura muy similar a la que hizo en el recinto el diputado Miguel Ángel Pichetto… perder ganando.
Soberbia en el poder
“Entristece mucho ver que existen diputados que no pueden sostener una decisión que fue consensuada y trabajada para lograr la media sanción de la ley. Es difícil entender este cambio de posición, tan sorpresivo. La verdad que entristece mucho”, agregó De la Sota sobre los cambios de último minuto y las ausencias por “enfermedad”.
De la sota suele discontinuar la unidad en su relación con el resto de las bancas del groseramente denominado “cordobesismo”. No acompañó, por ejemplo, el paquete de leyes Bases, que sí fue votado por el resto de los cordobeses en Diputados por mandato vertical del gobernador Martín Llaryora.
Sobre la naturaleza del conflicto entre los estamentos de las universidades y el Gobierno central, la diputada señaló que “no tiene nada que ver con una cuestión económica. Tiene que ver claramente con una posición ideológica, filosófica. Eso es preocupante. En el fondo no se trata de una cuestión de recursos».
Luego de dos masivas marchas federales, y la unanimidad que los sondeos de opinión muestran en lo relativo a la causa universitaria, parece ser el momento para un protagonismo más decidido por parte de los estudiantes, que salieron a la escena pública este miércoles luego de que prosperara el veto en la Cámara de origen.
En Córdoba, las facultades de Comunicación y Ciencias Sociales fueron tomadas por los alumnos. En Salta los estudiantes protestaron en el Rectorado. Van sucediendo las réplicas en otros puntos del país. Este jueves habrá paro -sin asistencia a los lugares de trabajo- en todas las universidades nacionales.
“Las encuestas dicen que la sociedad apoya el reclamo universitario. El 80 por ciento dice que no apoya los recortes a la educación. Por eso creo que es cuestión de tiempo. Creo que los reclamos van a seguir creciendo”, interpretó De la Sota.
«La sociedad va a tener la sensación de que el Gobierno nacional no está escuchando. Y no hay peor cosa que cuando la soberbia se apodera de quien está en el poder. Creo que eso es lo que ha pasado», renueva sus críticas contra el Gobierno nacional, siempre atenta a cuál es, si es que existe, el proyecto político-social de LLA.
“No alcanzó pero no bajaremos los brazos, porque hay estudiantes que se lo merecen, y las y los trabajadores también”, agrega el mismo comunicado del CIN. Se abre una nueva etapa del conflicto entre el Gobierno y las universidades. ¿Qué hará la política? ¿La oposición? ¿Qué tan sustentable es la victoria parlamentaria de este miércoles para el Gobierno?