Centrales obreras, gremios, jubilados y organizaciones políticas se concentraron en el centro de la ciudad con una olla popular, radio abierta y una marcha para rechazar el proyecto de reforma laboral que se debate en el Congreso.
Centrales obreras, sindicatos y diversas organizaciones sociales protagonizaron este jueves una movilización en el centro de Río Cuarto en rechazo al proyecto de reforma laboral que impulsa el Gobierno nacional. La jornada comenzó a las 9 de la mañana con una olla popular, continuó con una radio abierta desde las 11 y concluyó con una marcha por las calles céntricas para visibilizar el reclamo.
A través de un comunicado conjunto, los gremios de Río Cuarto expresaron un fuerte rechazo a la iniciativa y advirtieron que el proyecto “plantea un presente en el que se otorga más poder a los empleadores debilitando a los trabajadores y a sus organizaciones”. En el documento señalaron que la reforma podría facilitar despidos más baratos, promover la informalidad y avanzar “en un ataque directo al sistema de seguridad social”, además de cuestionar la extensión de la jornada laboral, el banco de horas, la reducción de salarios por enfermedad o accidente, la licuación de indemnizaciones y la limitación del derecho de huelga.
“Estas y otras formas que se debaten en el Congreso Nacional solo buscan destruir el andamiaje jurídico, económico y social de un país que supo priorizar el empleo, el salario y las condiciones de trabajo digno”, afirmaron, y convocaron a “dar una respuesta contundente frente a esos avances que solo nos perjudican”.
Durante la radio abierta, Rafaela Alcoba, secretaria general de ATE y de la CTA Autónoma Regional Río Cuarto, sostuvo que la movilización se realiza “en rechazo a una reforma que pretende legalizar sistemas de esclavitud, hacer transferencias de fondos a las patronales y seguir aplastando a la clase trabajadora”. Además, remarcó que se trata de un proyecto anunciado durante la campaña electoral y que ahora “se está pormenorizando y no lo podemos permitir”.
“Hay conquistas históricas de nuestra clase que las defendemos hoy en la calle. Salir a movilizarnos es demostrarle al gobierno que hay descontento y que el pueblo está organizado”, expresó Alcoba, al tiempo que llamó a exigir a los representantes legislativos cordobeses que rechacen la reforma.
Por su parte, Miguel Riera, secretario de Asuntos de AGEC Río Cuarto, cuestionó la falta de diálogo con los sindicatos. “Nunca nos invitaron a sentarnos a charlar para determinar qué es lo bueno para los trabajadores. Nos dicen que va a venir empleo, pero nos están mintiendo en la cara”, afirmó. En ese sentido, sostuvo que “las conquistas se consiguen en la calle” y alertó sobre el impacto que la reforma podría tener en las obras sociales y los aportes gremiales.
“El trabajador ve el recibo de sueldo, pero no siempre sabe para qué sirven los aportes. Todo eso sostiene la salud, los servicios y los derechos que hoy están en riesgo”, agregó.
Desde el sector universitario, Daniel Garis, secretario general del gremio nodocente de la UNRC, explicó los motivos del paro de 24 horas que acompañó la jornada de protesta. “No hay ningún artículo de esta ley que esté a favor de los trabajadores. Todos van en contra y, lo que es peor, avanzan en un desfinanciamiento del sistema previsional”, señaló.
Garis advirtió que la reducción de aportes patronales “implica menos recursos para la ANSES y para las futuras jubilaciones” y sostuvo que este camino “es el paso previo a intentar reinstalar un modelo como el de las AFJP”.
La movilización también contó con la participación de espacios políticos. Lorena Rojas, referente del Frente de Izquierda y de los Trabajadores en Río Cuarto, calificó el proyecto como “un ataque brutal a la clase trabajadora”. “Estamos hablando de extender la jornada laboral hasta 12 horas, de pagar en especies y de avanzar hacia un trabajo barato y precarizado. Desde las calles y desde el Congreso nos vamos a oponer a esta reforma”, afirmó.
Además, llamó a fortalecer la unidad: “Tenemos que construir la unidad de la clase trabajadora. La lucha por la jornada de ocho horas costó décadas y hoy quieren hacernos retroceder”.
Desde el Frente de Jubilados y Pensionados, Guillermo Ashworth puso el foco en el impacto de la reforma sobre el sistema previsional. “Reducir los aportes patronales desfinancia la ANSES y hace que los trabajadores terminen pagándose su propia indemnización”, sostuvo. “No se genera empleo sin un proyecto productivo de país; cerrar fábricas y apostar a la patria financiera no crea trabajo”, agregó.
Finalmente, Cristian Montoya, secretario gremial del SUEM Río Cuarto, remarcó que la reforma implica “un retroceso muy grave en las condiciones y derechos laborales”. “Esto nos va a afectar a todos. Por eso es fundamental visibilizarlo y generar conciencia de clase”, afirmó.
La jornada culminó con una marcha por el centro de Río Cuarto, donde los distintos sectores coincidieron en la necesidad de sostener la movilización y el reclamo colectivo frente al avance del tratamiento legislativo de la reforma laboral.