El miércoles se producirá el último encuentro legislativo del 2022 en la Unicameral provincial y hay expectativa por el tratamiento del proyecto que busca modificar la ley 10.406. Los intendentes presionan y advierten sobre el costo político que el no tratamiento puede tener en la campaña de Martín Llaryora.
Nueva semana de altas expectativas y más alta incertidumbre, justo en la recta final del 2022 que marcará también la última sesión legislativa del Parlamento provincial. Como ocurrió durante todo diciembre, la comunidad política provincial esperan que la Unicameral aborde en su orden del día el proyecto que plantea la modificación de la ley que impide la re-reelección de intendentes que hayan cumplido con dos mandatos seguidos.
Desde hace meses, los jefes municipales en esta situación piden por la reinterpretación del Artículo N°: 4 de la Ley Provincial N°: 10.406. Según lo planteado por los reclamantes, “la Ley debiera tener vigencia a partir del presente mandato (2019-2023) y no desde 2015-2019, como establece tal Ley”.
Entre una multiplicidad de idas y vueltas, finalmente se llegó a este punto en el que varios dirigentes y referentes del oficialismo provincial -Hacemos por Córdoba- evalúan la posibilidad de aprobar semejante modificación, pensando en el latigazo que pueda generar su no tratamiento en las expectativas de campaña que se tienen para el 2023 con Martín Llaryora como candidato a gobernador del PJ provincial.
Pese al envión por el «sí» de la modificación, la encrucijada oficialista tiene como variable la opinión del propio gobernador Juan Schiaretti, quien ya ha comunicado que no está de acuerdo con modificar una ley que fue aprobada durante su gestión. Aún así, hay quienes informan que el más interesado en que salga la «re-re» es Martín Llaryora, quien deberá comenzar el año próximo de campaña por el interior y que necesitará del apoyo de intendentes que ahora amenazan con hostilizar el terreno si no se aprueba el proyecto.
Del otro lado, el radicalismo -el bloque Juntos UCR- sostiene su postura de no intervenir en esta cuestión y tira la pelota del lado del peronismo. Más allá de que son muchos los intendentes radicales del interior que piden por la «re-re», sus referentes legislativos mantienen la posición de no pelear por el proyecto de modificación. “Si hay quorum, que al consenso lo busque el oficialismo”, deslizan desde el bloque UCR.
Mientras se espera por una definición, la cual podría llegar a último momento antes de la sesión del miércoles, los intendentes siguen presionando para lograr el cometido. “No están midiendo los costos que genera esta incertidumbre. Les puede traer algún problema en su campaña no tener en cuenta la autonomía de los municipios”, comentan entre los intendentes del sur que afrontan esta situación. Si no sale en diciembre, seguirán empujando para que vuelva a tratarse apenas se reanude la actividad legislativa.
