En medio de una creciente tensión interna por la conformación de las listas de La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires, Karina Milei, secretaria general de la Presidencia, salió al cruce de las críticas con un mensaje firme que buscó reforzar la unidad del espacio.
Su declaración fue tajante: quienes ponen en duda a los representantes del movimiento, están, en realidad, cuestionando directamente al Presidente.
El pronunciamiento de Milei apunta a responder a las voces libertarias que quedaron fuera del armado electoral y que expresaron su malestar por la incorporación de figuras provenientes de otros sectores políticos.
En ese contexto, brindó un respaldo explícito a Sebastián Pareja, referente clave de La Libertad Avanza en territorio bonaerense y responsable de la selección de candidatos.
Karina dejó en claro que en este proyecto hay lugar para todos los que defiendan con integridad los principios de la libertad, pero subrayó que no hay espacio para las concesiones ideológicas. La línea es clara: quienes se sumen deben hacerlo con convicción plena, sin poner en juego los valores fundacionales del espacio.
Para cerrar filas, Milei puso el foco en el adversario común: el kirchnerismo. “No vinimos a negociar con lo que queremos combatir”, sentenció, reafirmando el objetivo principal del espacio y marcando el fin de la discusión interna.
