El joven murió electrocutado en enero de 2022 mientras jugaba con su hermano en una plaza del barrio Alto Alberdi. La Cámara 3 del Crimen no encontró responsabilidades y pidió una nueva investigación.
La Justicia de Córdoba absolvió este martes a cuatro funcionarios y empleados del Departamento de Mantenimiento de la Dirección de Alumbrado Público de la Municipalidad, en el marco de la causa por la muerte de Luciano Aranda, el adolescente de 14 años que falleció tras recibir una descarga eléctrica en una plaza de la ciudad. El tribunal dispuso además enviar el expediente al Ministerio Público Fiscal para continuar investigando las responsabilidades concretas del hecho.
Los absueltos son Julio Sebastián Banegas, Hugo Chocabares, Ramón Cuello y Marcos Farioli, quienes habían llegado a juicio acusados de homicidio culposo. El veredicto descartó que tuvieran responsabilidad penal en el siniestro.
El abogado querellante, Carlos Nayi, representante de la familia de Luciano, sostuvo que la plaza donde ocurrió el hecho presentaba “deficiencias de años” y que, de haberse tomado medidas de mantenimiento oportunas, la muerte se podría haber evitado. Afirmó que la prueba reunida en la causa es “contundente” respecto de las fallas estructurales. Anticipó que esperarán los fundamentos del fallo para definir si apelarán ante la Cámara de Casación.
Por su parte, uno de los defensores de los acusados, Pedro Despouy, indicó que sus representados no fueron los responsables del riesgo eléctrico y atribuyó el origen del siniestro a un acto de vandalismo, tras la rotura de una tapa en la columna del poste. También señaló que el área de Alumbrado Público trabaja con personal e insumos insuficientes para realizar controles preventivos en toda la ciudad.
Despouy detalló que existen más de 160 mil luminarias en Córdoba y solo diez personas asignadas a su mantenimiento, con cinco cuadrillas operativas. Aseguró que los trabajadores habían reclamado en reiteradas oportunidades la incorporación de más personal y recursos para evitar situaciones similares.
La muerte de Luciano Aranda reavivó el debate sobre el estado de las instalaciones públicas y la necesidad de reforzar los controles de seguridad en las más de mil plazas que hay en la ciudad. Ahora, la investigación fiscal deberá avanzar para determinar nuevas responsabilidades en el caso.
Foto: Cba24N
