Desde Innovar Consultoría Integral de Turismo creemos firmemente en el potencial del turismo como un motor de desarrollo sostenible para las economías regionales. Los fines de semana largos son una pieza clave en este engranaje, y cualquier propuesta que busque eliminarlos debe considerar el impacto negativo que tendría sobre las comunidades que dependen de ellos.
Compartimos nuestra visión respecto al reciente informe del Instituto de Economía (INECO) de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE), que propone recortar los fines de semana largos en Argentina, bajo el argumento de que estos generan pérdidas económicas y favorecen solo a un pequeño porcentaje de la población. Consideramos que esta visión es limitada y no refleja la complejidad del impacto que el turismo tiene en las economías regionales ni el rol social y cultural que desempeña en nuestro país.
El turismo como motor de las economías regionales
Uno de los pilares que sostenemos en Innovar es que el turismo es, sin lugar a dudas, un motor fundamental para las economías regionales en Argentina. Los fines de semana largos representan una ventana crucial para el desarrollo económico en localidades que dependen casi exclusivamente del turismo. A diferencia de las grandes urbes, donde la industria y los servicios pueden sostener el empleo de manera constante, en muchos pueblos y ciudades pequeñas, la actividad turística es el eje que permite mantener abiertas las puertas de hoteles, restaurantes, comercios y servicios.
Los fines de semana largos actúan como una oportunidad de reactivación económica para estas comunidades, generando empleo directo e indirecto. Las cifras son claras: en muchas localidades, estos periodos representan un porcentaje sustancial de los ingresos anuales, contribuyendo a evitar el éxodo rural y fomentando el arraigo de las personas a sus comunidades. El impacto en términos de empleabilidad, especialmente en sectores como la gastronomía, la hotelería y las actividades recreativas, es incuestionable.
Una visión incompleta
El informe de la UADE parece tener una visión simplificada del turismo al considerar solo el impacto negativo que podría tener sobre otros sectores productivos como la industria, ignorando el hecho de que el turismo es uno de los sectores más dinámicos y de mayor crecimiento en Argentina. No solo genera ingresos a través del consumo de bienes y servicios en destinos turísticos, sino que también impulsa la cadena de valor en sectores como la producción alimentaria local, la artesanía y la cultura.
Es fundamental recalcar que las economías regionales no solo se benefician del turismo en términos económicos, sino también en lo social y cultural. Los fines de semana largos brindan una oportunidad para que los argentinos conozcan su propio país, fomentando un sentido de pertenencia y orgullo por sus raíces, sus paisajes y su historia. Este tipo de turismo interno es clave para la preservación del patrimonio cultural, y contribuye a fortalecer la identidad local.
Turismo interno vs. turismo receptivo: una falsa disyuntiva
Una de las propuestas del informe de INECO es que se reduzcan los fines de semana largos para incentivar más el turismo receptivo internacional. Si bien desde Innovar estamos de acuerdo en que atraer más turismo extranjero es una oportunidad que Argentina debe seguir explorando, no creemos que esto deba lograrse a expensas del turismo interno. Ambas formas de turismo son complementarias, y cada una aporta de manera distinta al desarrollo del país.
En lugar de limitar el acceso de los argentinos a sus destinos turísticos, el foco debería estar en mejorar la infraestructura y reducir los costos de transporte y alojamiento, tanto para turistas locales como internacionales. Esta es una estrategia más inclusiva y que verdaderamente potenciaría la competitividad de Argentina como destino, sin sacrificar el crecimiento de las economías regionales.
La importancia de los fines de semana largos
Los fines de semana largos no son simplemente días de descanso, sino que representan un respiro para miles de familias y pequeñas empresas que dependen del turismo para su sustento. Desde Innovar hemos visto, a través de nuestros proyectos y consultorías, el impacto positivo que tienen estos periodos en localidades que, de otro modo, tendrían pocas oportunidades de generar ingresos adicionales.
Además, es importante recordar que el turismo es una de las actividades más resilientes y con mayor capacidad de adaptación frente a los cambios económicos y sociales. Las estrategias que apuntan a recortar oportunidades para el turismo interno no solo debilitan a las economías regionales, sino que también subestiman el rol estratégico que el turismo puede jugar en la recuperación económica a largo plazo.
Conclusión
Desde Innovar Consultoría Integral de Turismo creemos firmemente en el potencial del turismo como un motor de desarrollo sostenible para las economías regionales. Los fines de semana largos son una pieza clave en este engranaje, y cualquier propuesta que busque eliminarlos debe considerar el impacto negativo que tendría sobre las comunidades que dependen de ellos.
La solución no está en recortar oportunidades para el turismo interno, sino en crear políticas que mejoren el acceso y fomenten el crecimiento de todo el sector turístico, tanto a nivel local como internacional. El turismo no es solo una cuestión económica, sino una herramienta poderosa para el desarrollo social, cultural y económico de nuestro país. En este sentido, los fines de semana largos deben ser vistos como una inversión estratégica en nuestras regiones, y no como un costo a reducir.