Según un informe de FADA, las cadenas agroindustriales representan el 22% del empleo privado nacional y están presentes en todas las regiones del país.
Un nuevo informe de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA) reveló que más de 4,2 millones de personas trabajan en las cadenas agroindustriales del país, lo que representa el 22% del empleo privado nacional. En total, este sector llena el equivalente a 51 estadios como el MetLife, donde se jugó la final del reciente Mundial de Clubes.
El estudio de FADA toma como punto de partida la competencia internacional de fútbol para graficar el impacto del agro en la generación de empleo. Por ejemplo, la cadena de la carne vacuna —con más de 500 mil trabajadores— se equipara al Chelsea, el campeón del torneo. Las frutas y verduras, con más de 450 mil empleos, representan al PSG. El trigo, que supera los 400 mil puestos de trabajo, se ubica en el tercer lugar. Además, la vitivinicultura da trabajo a 146 mil personas, equivalente a más de 13 mil equipos de fútbol.
Las cadenas de granos y forrajeras son las principales generadoras de empleo dentro del sector, con un 31% del total. Le siguen las economías regionales (29,1%), las cadenas de carnes y lácteos (23,8%) y los bienes de capital (1,8%). Los servicios conexos y otras actividades complementarias suman el 14,3%.
El informe detalla que el 33% del empleo agroindustrial se concentra en la producción primaria, seguido por el comercio (27%), la industria (22%), los servicios conexos (9%), el transporte y la logística (5%) y los insumos y maquinarias agrícolas (4%).
Desde FADA explican que el impacto del agro trasciende las zonas rurales. Cada producto que llega a la mesa involucra múltiples actividades: desde la fabricación de maquinarias y la siembra, hasta el transporte, la comercialización y la administración. El clásico asado de los domingos, por ejemplo, representa el trabajo de miles de personas de distintos rubros y regiones.
En cuanto a la evolución del sector, el empleo agroindustrial creció un 2,1% respecto a la edición anterior del informe. Las cadenas que más aumentaron su nivel de ocupación fueron el girasol, el tabaco, las frutas y verduras, el sector lácteo y la maquinaria agrícola.
El informe también subraya la importancia de contar con políticas públicas estables que promuevan el desarrollo equitativo en todas las regiones del país. Las cadenas agroindustriales tienen presencia desde la Patagonia —con la producción ovina— hasta el NEA —con la yerba mate—, pasando por los vinos de Cuyo, el maíz de la región pampeana y la caña de azúcar del NOA.
Finalmente, FADA advierte que uno de los desafíos actuales es mejorar la calidad del empleo. Si bien el agro aporta significativamente al trabajo formal, en los últimos años el crecimiento del empleo total en el país se ha dado, en su mayoría, a través de formas más inestables y con menor protección laboral.