Por medio de una iniciativa presentada en el Legislativo local, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Río Cuarto insta al Ejecutivo a instalar, mantener y reformar sitios señalizados por su importancia en la historia de la lucha por la memoria, verdad y justicia local.
La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Río Cuarto presentó el «Informe sobre el estado de las señalizaciones de marcas y sitios de memoria en Río Cuarto» ante la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Concejo Deliberante, Miriam Salvatierra; y realizó una presentación formal ante la Subsecretaría de DDHH de la Municipalidad de Río Cuarto solicitando acciones pertinentes.
El informe divide la situación de las señalizaciones de marcas y sitios de memoria en tres: 1. Directamente inexistentes, 2. Deterioradas por la desidia u omisión del Estado y 3. Elaboradas con materiales escasamente legibles, colocadas con descuido y en lugares poco visibles.
En ese sentido, la Asamblea Permanente detalla en su informe algunas de las locaciones en las que no se han llevado adelante tareas de mantenimiento y señalización.
“Hay lugares en Río Cuarto que no cuentan con ningún tipo de identificación y señalamiento visible por parte del Estado. Estamos hablando de la Unidad Regional Departamental Río Cuarto de la Policía de la Provincia de Córdoba (uno de los espacios más importantes, donde fueron detenidas más de 150 personas), la Unidad Penitenciaria N°6 y el domicilio de Elsa Gladys Comba”, expresaron.
En ese sentido, reclamaron que en el caso de la Unidad Penitenciaria N°6, el Estado nunca colocó en esta dependencia una placa que lo reconozca como espacio de memoria. Asimismo aclararon que estos lugares son material probatorio relevante en los juicios por delitos de lesa humanidad.
“A pesar de que en anuncios públicos se destaca una supuesta política de sitios en la ciudad, hoy el Estado Municipal está por fuera de los estándares en Derechos Humanos establecidos por la normativa nacional e internacional. En este contexto es imprescindible que los sitios y marcas de memoria relacionados con violaciones de derechos humanos, tanto en Argentina como en todo el mundo, desempeñen un papel fundamental en la preservación de la memoria histórica, la educación y la prevención de futuras atrocidades. Los Derechos Humanos no son una prenda electoral. Son herramientas de la sociedad toda para construir una democracia sólida con plena vigencia de los derechos. Esos mismos que siguen siendo declarados en los papeles pero no se materializan en la calle y en las casas”, concluyeron.
