El viudo, dos vecinos y un policía se presentarán ante el tribunal en la segunda jornada del juicio. Los hijos del único imputado anunciaron que presentarán pruebas sobre un sospechoso del homicidio al que «nunca investigaron».
Marcelo Macarrón prestará declaración este martes en la segunda audiencia del juicio oral y público que lo tiene como único imputado, como presunto instigador, por el crimen de su esposa Nora Dalmasso que ocurrió el 6 de noviembre de 2006 en la ciudad de Río Cuarto.
Además fueron citados tres testigos, dos de ellos son vecinos y están vinculados al hallazgo del cuerpo sin vida de Nora, mientras que el restante se trata de un efectivo policial que ingresó a la vivienda luego del hallazgo de notificado el hallazgo del cuerpo de la víctima.
El proceso de enjuiciamiento comenzó este lunes con una jornada dedicada únicamente a la lectura de la requisitoria fiscal de elevación a juicio y continúa hoy martes.
Primer día del juicio
La apertura del proceso de enjuiciamiento dejó como puntos salientes la declaración de Macarrón que calificó de “mamarracho” el expediente elevado a juicio en 2019 por el fiscal Luis Pizarro que le calificación legal de “homicidio calificado por el vínculo, por alevosía y por precio o promesa remuneratoria en concurso ideal” que contempla pena de prisión perpetua.
No obstante el viudo se manifestó con “expectativas buenas” con respecto a su situación procesal, a pesar de que consideró “es muy difícil» poder esclarecer el crimen de su esposa «después de tantos años».
Facundo (33) y Valentina (30), hijos del acusado, acompañaron a Macarrón al ingreso a la sala de audiencias y luego reforzaron el apoyo con una manifestación que encabezaron, junto a familiares y amigos en los tribunales donde ocho jurados populares y los jueces técnicos de la Cámara Criminal y Correccional de 1° Nominación de la ciudad de Rio Cuarto llevan el proceso del juicio.
Allí los hijos de Macarrón anunciaron que cuando declaren en la causa, probablemente la próxima semana, presentarán pruebas sobre el sospechoso del homicidio al que «nunca investigaron». Se trataría de un “empresario que era amigo de la familia”, por lo que se intuye que las acusaciones de los hijos apuntarían a Miguel «el francés» Rohrer, empresario que por aquellos días era cercano a la familia.
“Hemos aportado un montón de pruebas sobre el sospechoso del crimen que nunca se valoraron ni se investigaron”, dijo Valentina Macarrón al referirse a la persona que apuntan como el autor del crimen, y remarcó que su papá es “inocente”.
En iguales términos se expidió su hermano Facundo y aseveró que “desde el punto de vista lógico y jurídico, jamás se puede llegar a una sentencia condenatoria” porque “la acusación no tiene ningún sustento probatorio. No tiene respaldo de hechos objetivos que justifique que mi padre esté hoy sentado en el banquillo de los acusados”.
El cuerpo sin vida de Nora fue encontrado el 26 de noviembre de 2006 en su casa del country Villa Golf de Río Cuarto, y, según los informes forenses, la mujer fue asesinada mediante una asfixia mecánica utilizando la bata de baño ajustado como doble lazo alrededor del cuello.
Según el fiscal Pizarro, como parte del plan criminal, el asesino “ordenó la escena con la finalidad de simular un hecho de índole sexual, tras lo cual se retiró del lugar, sin dejar rastro alguno de su persona”.