Con el voto de los concejales de Hacemos Unidos por Córdoba, Primero Río Cuarto y la Fuerza del Imperio del Sur se aprobó el proyecto para acompañar el reclamo de docentes, nodocentes y estudiantes de la UNRC por el desfinanciamiento del sistema universitario y el pedido de recomposición salarial. El único que no apoyó fue Mario Lamberghini del Partido Libertario.
Miembros de la Universidad Nacional de Río Cuarto realizaron un «Ruidazo» frente al Concejo Deliberante para pedir acompañamiento al aclamado pedido de aprobación por parte del Senado de la Nación de la Ley de Financiamiento Universitario, que ya tiene media sanción de la Cámara de Diputados.
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Durante un encuentro con los concejales, María Florencia Granato, secretaria general de la Asociación Gremial Docente (AGD-UNRC) expresó: “Es una situación que no se ha vivido en los 40 años de democracia. No ha habido Gobierno nacional que hay presentado esta afronta al sistema universitario nacional, no se ha visto. De Alfonsín hasta acá nunca había acontecido esto. Tenemos los salarios más bajos de estos 40 años. Eso pone en riesgo inminente a la Universidad, porque se va vaciando”.
“La universidad argentina ha dado muestras de ser un pilar del desarrollo económico, social, cultural y político del país. En general, los científicos están en las universidades. En eso radica la posibilidad de ser soberanos como país”.
Seguidamente, Granato pidió el acompañamiento de los concejales. “Ustedes son los representantes del pueblo, son nuestros representantes. Y pueden influir en los senadores para que aprueben este proyecto de Ley –de financiamiento Universitario-. Es todo el pueblo argentino junto quien puede defender la educación pública”.
“La situación puntual de nuestro sector e muy crítica”, comenzó diciendo Daniel Garis, secretario general del gremio Nodocente, a la vez que comentó que las categorías más bajas tenían hasta diciembre una cláusula de garantía salarial de 360 mil pesos para las categorías. Luego –dijo- fue quitado este piso que aseguraba alcanzar la canasta alimentaria, que hoy cuesta 800 mil pesos, mientras que el sueldo de bolsillo de la categoría 7 es de entre 520 mil pesos. Las tres categorías iniciales 7, 6 y 5 están cobrando menos de 800 mil pesos, eso representa el 55 por ciento de los trabajadores”.
El dirigente pidió: “Queremos que nos acompañen en la defensa de la Universidad. En Argentina, la educación pública no se puede tocar, porque es nuestra bandera. El país sin educación está destinado al fracaso. Quiero que piensen, ustedes que legislan para la ciudad, lo que va a significar que la Universidad se caiga. Les pido que nos acompañen, porque se está cayendo la Universidad a pedazos y este Gobierno no nos escucha, no le interesamos para nada. Necesitamos el acompañamiento de la sociedad vamos a caer en el precipicio del cual ya estamos al borde”.
Lautaro Zabala Defagot, secretario general de la Federación Universitaria de Río Cuarto, sostuvo “La Universidad no distingue colores políticos. Creemos que la Universidad puede ser arancelada. En abril la sociedad mandó un mensaje claro: con la Universidad no se jode”.
“Las becas están atadas a los presupuestos, las becas están totalmente desfinanciadas, las nacionales y las de la propia Universidad. La situación es cada vez más crítica, la calidad de vida se ve reducida, sobre todo en lo que tiene que ver con la alimentación, muchos estudiantes no logran alcanzar la calidad nutricional mínima, con un paquete de fideos tiran dos comidas. La situación es crítica y alarmante. Muchos estudiantes tienen que salir a trabajar para poder seguir sosteniendo su carrera universitaria”.
El dirigente estudiantil pidió a los concejales que trabajen coco a codo con los estudiantes. Y, “sobre todo”, que “piensen en los estudiantes”.
En este marco, los concejales de los bloques Hacemos Unidos por Río Cuarto, Primero Río Cuarto y La Fuerza del Imperio del Sur votaron a favor de la aprobación del proyecto para acompañar el reclamo de la comunidad universitaria por el desfinanciamiento de las universidades y el pedido de recomposición salarial para sus trabajadores. El único concejal que no apoyó este reclamo fue Mario Lamberghini del Partido Libertario.
