La clave está en los antecedentes del acusado. Pablo Jávega explicó en qué circunstancias podría avanzar el proceso judicial.
La conmoción fue muy grande cuando ayer, en horas del mediodía, el fiscal Pablo Jávega convocó a una conferencia de prensa en la que pondría el foco sobre un nuevo sospechoso en la causa relacionada a la muerte de Nora Dalmasso. Se trata de Roberto Bárzola, el “pulidor de pisos”, quien hasta ahora había pasado casi desapercibido.
Lo cierto es que el hecho sucedió hace 18 años, y por ende la causa está prescripta. Según explicó el propio Jávega, en el caso de un homicidio como el que se le adjudica a Bárzola “la acción penal pierde vigencia a los 15 años de ocurrido el hecho”.
Sin embargo, el fiscal advirtió que “el mismo código establece que si esa persona comente un hecho delictivo, el conteo que se venía llevando de ese plazo vuelve a cero”. Esto significa que la clave de la investigación estaría en encontrar un delito del cual este nuevo sospechoso haya sido partícipe o protagonista, y cuyos plazos para ser juzgado no estén vencidos.
Lo interesante es que no necesariamente tendría que ser un delito del mismo calibre que este homicidio, por lo cual la fiscalía ya se encuentra trabajando en rastrear cualquier tipo de antecedente que pueda estar relacionado a Bárzola.
Por último, el fiscal aclaró que en principio el nuevo apuntado habría actuado solo: “Al momento de la fecha, no tengo elementos para predicar que alguna otra persona le haya prestado colaboración”.
Fuente: Cba24N
