Marcos Curletto, concejal del bloque Juntos por Río Cuarto.
Este jueves a las 20 horas, la sede de la Unión Cívica Radical (UCR) de la ciudad de Río Cuarto, ubicada en calle Cabrera al 700, será escenario del acto de asunción de las nuevas autoridades partidarias. En este evento clave para el centenario partido, dirigentes locales y regionales asumirán formalmente la conducción del radicalismo, marcando el inicio de una nueva etapa de trabajo y reorganización política.

Entre los dirigentes que asumirán cargos se encuentran Walter Perrone, como presidente del Comité Departamental; Marcos Curletto, a la cabeza del Comité Río Cuarto; Rita Farias, quien dirigirá el Comité Alberdi; y Martín Carranza, como referente del Comité Banda Norte.

La renovación de autoridades llega en un momento delicado para la UCR, tanto a nivel local como provincial y nacional. En las últimas elecciones, el partido sufrió importantes derrotas, tanto en los comicios provinciales de Córdoba, donde el radicalismo no logró recuperar protagonismo, como en las elecciones municipales de Río Cuarto que, a pesar de competir contra un peronismo dividido no logró imponerse en los comicios. Estos resultados, que marcaron un fuerte golpe para la estructura partidaria, demandan una reconfiguración estratégica.

El nuevo equipo que asume tiene por delante el desafío de revitalizar al radicalismo en un escenario político donde deberá redefinir su rol frente a la sociedad riocuartense.

La UCR y el contexto nacional: entre el apoyo a Milei y las críticas al Gobierno

En el plano nacional, la situación para la UCR es igual de compleja. Mientras algunos sectores del partido, en especial figuras más alineadas al ala libertaria, han manifestado su apoyo al actual presidente Javier Milei, otros dirigentes se muestran más críticos, cuestionando las políticas del gobierno en áreas como la educación y la gestión social. Esta división en las filas radicales genera tensiones internas, que también se reflejan en la conducción local y provincial.

En este sentido, la nueva conducción en Río Cuarto deberá lidiar con estas tensiones y encontrar un equilibrio que permita articular una visión partidaria coherente que no solo resuene a nivel local, sino que también se enmarque dentro del debate político nacional. La cercanía con las elecciones legislativas de 2025 será una prueba de fuego para este renovado liderazgo.

Una oportunidad para el diálogo y la unidad

El acto de mañana no solo será un espacio para oficializar los cambios de mando, sino también una oportunidad para que los nuevos dirigentes locales envíen un mensaje claro a la militancia radical: la importancia de la unidad y del diálogo interno para enfrentar los desafíos que se vienen.

Con un panorama político incierto, tanto por los reacomodamientos locales como por las divisiones en el contexto nacional, el radicalismo riocuartense tiene el reto de volver a posicionarse como una fuerza política relevante, capaz de generar propuestas sólidas y de conectar con los problemas cotidianos de la ciudadanía.

La jornada de renovación de autoridades promete ser el primer paso en este nuevo camino que la UCR de Río Cuarto debe transitar con la convicción de recuperar su histórica influencia en la política local y provincial.

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