Recaudación, modificaciones en la matriz impositiva, modernización del Estado y «mantener el equilibrio fiscal», cuestiones abordadas por el titular de la Secretaría de Economía municipal.
El secretario de Economía del Gobierno de Río Cuarto, Pablo Antonetti, trazó un balance de su gestión tras confirmarse la toma de deuda por 850 millones de pesos para sostener el avance de la obra pública.
En diálogo con Córdoba Hoy, el funcionario repasó la actualidad económica, la evaluación de la política tributaria en la gestión de un municipio y los nuevos paradigmas que cruzan a la actividad pública.
Córdoba Hoy: En tiempos como los que se viven, varios municipios de la provincia y el país están evaluando, incluso impulsando, modificaciones impositivas para hacerle frente a la inflación y el impacto en la recaudación. ¿Es algo que está en plan de esta gestión?
Pablo Antonetti: Yo creo que hay que pensar en cambiar la matriz impositiva y los niveles de cobertura. Hoy la Municipalidad se maneja con dos grandes ingresos ajustados por actividad, la coparticipación y comercio industria. No ocurre lo mismo con patente e impuesto inmobiliario. Este año planteamos tres tramos de aumento que totalizaron un 65% en el caso del inmobiliario, pero la realidad inflacionaria nos hace pensar que terminaremos el año con el doble de ese porcentaje. Esta situación socaba las cuentas públicas y no tiene correlato con el costo asociado al servicio que recauda esa contribución. Eso debe ser necesariamente revisado y generar una actualización permanente que no implique una pérdida de recursos.
C.A: Entonces, ¿se puede pensar en modificaciones impositivas para este año?
P.A: Para nada. La matriz impositiva de este año es la que se aprobó y establece el código tributario. Estamos hablando de una nueva realidad que tendrá que ver con el comportamiento inflacionario durante los próximos años.
C.A: ¿Están evaluando modificar el presupuesto 2022?
P.A: Por una cuestión inflacionaria, al igual que el año anterior, seguramente se requerirá un aumento del presupuesto. Se aplicará en la generalidad de las áreas porque la inflación atraviesa a todas las secretarías. Entre agosto y septiembre estará terminado el proyecto para enviarlo al Legislativo.
C.A: Desde hace unos días se está hablando del pago de un adelanto del pago de subsidios a la empresa SAT (Sociedad Anónima de Transporte) hasta el mes de diciembre. ¿Qué los hizo evaluar esta cuestión?
P.A: No es un adelanto, sino una imputación presupuestaria para la segunda parte del año y con pagos que se realizan de forma mensual. Esta decisión surge de una técnica presupuestaria que cuando se conoce la totalidad del egreso se imputa para dar una previsión que no tiene que ver con la generación de órdenes de pagos posteriores.
C.A: A modo de balance, ¿cómo ha transitado estos siete años y medio de gestión?
P.A: Hemos tenido una gestión compleja, cruzada por variables económicas que atentaron contra la macroeconomía, contra las cuentas públicas y que también nos tuvo cruzados por una pandemia. Más allá de la búsqueda de lograr el equilibrio de las cuentas públicas, hemos dado un salto de calidad en cuanto a la modernización del Estado. Hoy se pueden pagar todos los tributos en línea, el 95% de los trámites de nuestra Secretaría se realizan de forma virtual, transparentamos las contrataciones, obtuvimos excelentes reportes de sustentabilidad, con un montón de otros logros que obtuvimos en equipo.
C.A: ¿Y qué es lo que se viene para lo que queda de la gestión?
P.A: Estamos frente a un proceso de cambio de paradigma necesario para la actividad pública. La tecnología, la innovación en sistemas, la Inteligencia Artificial, son temas que serán necesarios de estudiar y abordar para quien tome la posta del Gobierno.
C.A: Imagino que también se buscará sostener el superávit, ¿no?
P.A: Me alcanza con equilibrio fiscal.