“En niños, niñas y adolescentes de 5 a 17 años tenemos datos alarmantes: cerca del 40% de ese grupo etario presenta algunas de estas formas de exceso de peso”, indicó la licenciada en Nutrición Rosana Forcato, presidenta del Colegio de Nutricionistas de Córdoba.

Como todos los años este 16 de octubre se conmemora el «Día Mundial de la Alimentación». Fue implementado por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación.

La nutricionista dijo que el sobrepeso y la obesidad son las dos problemáticas más comunes en materia alimentaria en nuestro país y con una tendencia en alza.

“Desde edades tempranas, sobre todo en la edad pre-escolar, se advierte que han aumentado los índices de obesidad. Ya en niños, niñas y adolescentes de 5 a 17 años tenemos datos alarmantes: cerca del 40% de ese grupo etario presenta algunas de estas formas de exceso de peso”, indicó Forcato.

Respecto a los adultos, precisó que, a partir de los 18 años, “nos encontramos con un 66% de la gente adulta con sobrepeso. Eso lo convierte en la principal problemática nutricional alimentaria de nuestro país, sumado a otros factores que nos muestra la encuesta nacional como es la alta incidencia de hipertensión arterial en la población adulta asociado al consumo del doble de sodio diario recomendado”, advirtió la licenciada en Nutrición.

Educación alimentaria

La presidenta del Colegio de Nutricionistas de Córdoba dijo que la herramienta fundamental para revertir esta situación “es la educación alimentaria y nutricional”. Consideró que debería ser incluida desde la primera vinculación que tienen los niños con el sistema educativo en la edad preescolar.

Los niños y niñas comienzan a definir su conducta alimentaria alrededor de los 3 años. Esa información es transmitida por los padres o tutores. Por tal motivo, Forcato manifestó que “es ahí cuando la familia debe ir acompañando el proceso, ayudando a que reconozcan los momentos de comida, proveyendo alimentos más naturales, propiciando que pruebe diferentes sabores y texturas, e ir viendo cómo ampliar las opciones de alimentos”.

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“La incorporación de buenos hábitos alimentarios nutricionales desde edades pequeñas marca o es a lo que se aspira a futuro como una herramienta válida para modificar el actual ambiente obesogénico que genera toda esta situación”

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Sostuvo que recién en la edad escolar los niños y niñas pueden tener mayor autonomía, poder de decisión e interpretar conceptos y tomar otras decisiones en relación a sus grupos de pares.

La nutricionista indicó que el sobrepreso y la obesidad se deben al alto consumo de alimentos ricos en nutrientes críticos como son: el sodio, la grasa y los azúcares, sumado a la poca actividad física y a otros factores. En este aspecto, remarcó que el consumo de productos ultraprocesados tiene una gran incidencia para que la tendencia de la obesidad siga en alza.

Volver a las comidas caseras

Cuando hablamos del alto consumo de estos alimentos con nutrientes críticos hace referencia a los ultraprocesados. Manifestó que está demostrado que en los últimos tiempos se incrementó un 35% el consumo de este tipo de productos. Dijo que en estos productos ultraprocesados se puede ver uno o más de los nutrientes críticos. Entre ellos planteó como ejemplos los snacks, gaseosas, golosinas, etc.

Por ultraprocesados se entienden aquellos productos elaborados de manera industrial a partir de determinados alimentos, a los que se les agregan aditivos y otros ingredientes que dan sabor, sabor y textura similar a alimento de base, y que poseen un desequilibrio nutricional por exceso de componentes críticos y bajo contenido en fibra, proteína, minerales y vitaminas.

Forcato remarcó que se ha perdido bastante el momento de la comida como un espacio de encuentro familiar y de diálogo, y se opta por productos enlatados, envasados y ultraprocesados. Por tales motivos, considero que es fundamental “la idea es recuperar el hábito por la comida casera, elaborada o, al menos, que se consuman alimentos que tengan un mínimo de procesado”.

La nutricionista sostuvo que una alimentación saludable, basada en criterios de equilibrio y variedad, debe aportar una cantidad suficiente de nutrientes esenciales, y limitar la cantidad de nutrientes críticos que incrementan los riesgos de sufrir enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT) -como diabetes o enfermedades cardiovasculares-, principal causa de muerte y discapacidad en el mundo.

Por último, en este Día Mundial de la Alimentación, Rosana Forcato destacó el avance logrado a partir de la denominada «Ley de Etiquetado Frontal» para que el consumidor pueda acceder a una información nutricional más clara y que no sea engañosa.

Datos de la entrevistada

  • Lic. Rosana Forcato. MP 1958
  • Presidente del Colegio de Nutricionistas de Córdoba

Foto: https://quierocuidarme.dkv.es/

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