Dirigentes de la central se encontraron con el intendente para debatir sobre el flagelo de la pobreza. Además, le solicitaron por la reincorporación de los contratos caídos.
En diálogo con La Propaladora, la titular de la CTA en Río Cuarto, Rafaela Alcoba, brindó detalles del encuentro que mantuvieron con el intendente Guillermo De Rivas, en vías de trabajar una agenda conjunta centrada en brindar soluciones frente a la pobreza.
“Nosotros solicitamos una audiencia con el Intendente en el marco de la articulación que viene llevando adelante entre ambas instituciones, la Central y el gobierno municipal. El primer planteo fue poder debatir con la institución madre de la ciudad el tema de que la pobreza es hoy un flagelo que viene atacando fuertemente a nuestro país”, relató la dirigente.
Respecto al problema de la pobreza, señaló que “no es algo nuevo, pero que en ocho meses se haya profundizado fuertemente es alarmante, porque más del 50%de la población de Río Cuarto está bajo la línea de pobreza y 1 millón de niños se van a dormir sin comer”.
“El hambre es el mayor de los crímenes, lo venimos anunciando hace un tiempo que el hambre es un crímen en un país y una ciudad tan rica”, dijo Alcoba al expresar que la CTA “tiene un anclaje y un desarrollo territorial muy fuerte dentro de la ciudad”.
Adempas, le plantearon a De Rivas la necesidad de articular con las subsecretarías donde el municipio pueda aportar a las organizaciones y poder acercar el municipio a los barrios.
Respecto a la problemática del desempleo, Alcoba relató que le plantearon al intendente que se debe potenciar la creación de fuentes laborales. “El trabajo es esa herramienta que permite garantizar lo esencial y lo básico”, dijo.
En materia derechos humanos, la CTA aseguró que el país “está en un momento en el cual hay que salir en defensa de estas luchas que nos han costados sostener, construir y que hoy es responsabilidad nuestra no dejar que se pisoteen de lleno”.
En ese sentido, la dirigente de la central obrera afirmó que la demanda de asistencia en las barriadas aumentó en los últimos 8 meses. “Hubo una implosión hace 4 meses atrás donde en algunos casos se duplicó la demanda. En 20 merenderos estamos hablando que si antes teníamos 1000 niños hoy ese número está duplicado. Nos asombra que hoy incluso vecinos nos plantean que tienen un trabajo pero no cubren las necesidades básicas y están asistiendo a comedores y merenderos para garantizar al menos una comida al día. Tenemos una sociedad con un trabajador asalariado pobre, eso es lo grave que estamos observando. Incluso muchos bajo la línea de la indigencia”, indicó Alcoba.
Respecto al acompañamiento estatal, ponderó el compromiso del municipio de seguir ayudando a los comedores y merenderos “frente a la ausencia del Estado nacional”.
Por último, la CTA plantó su preocupación y oposición ante los contratos caídos en la Municipalidad. “Venimos denunciando que el estado nacional viene atacando a los trabajadores y el gobierno municipal no puede avanzar en esa misma línea. Hay que fortalecer el trabajo”, sostuvo.
