Rosa Cattana, directora del Observatorio de DDHH, se reunió ayer con representantes de la Asamblea local para coordinar acciones conjuntas y trazar lineamientos de la nueva gestión del Observatorio universitario.
Este jueves se reunieron en el campus representantes del Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad con pares de la Asamblea por los DD.HH. de Río Cuarto. El encuentro tuvo lugar en la sala Pereira Pinto de rectorado y sirvió para compartir inquietudes y lineamientos de la nueva gestión del observatorio, ahora con la coordinación de Rosa Cattana.
La agenda en torno de los derechos es amplia y contempla desde la revisión de crímenes perpetrados en los setenta a las acciones futuras, con eje en la construcción de una sociedad que no olvide y se abrace a la verdad y la justicia.
Cattana valoró la construcción social sostenida. Planteó que, si bien demandan tiempo, los cambios son posibles y lo ilustró diciendo: “Hace cien años las mujeres no iban a estudiar a la universidad, en contraste con la imagen de hoy, cuando el campus tiene rectora y vicerrectora”. Cabe destacar que la ex docente fue decana de la Facultad de Ciencias Exactas entre los años 2011 y 2017.
Juan Muzzolón, integrante de la Asamblea por los Derechos Humanos de Río Cuarto, se mostró expectante por la “continuidad en las acciones del observatorio”. El ex preso durante la dictadura militar indicó que “necesitamos de la ayuda de la universidad” para mantener viva la llama de los DD.HH. y recordó que la Asamblea es querellante en la causa Gutiérrez, apellido que remite a Hermes Vicente Gutiérrez, quien se desempeñó como jefe del área 3115 con sede en Río Cuarto durante la dictadura.
De aquellos años en los que estallidos literales, detenciones arbitrarias, secuestros, torturas, asesinatos, quema de libros y otras formas de censura, Joaquín Albornoz, de la asociación La Huella (integrante del Consejo Consultivo del Observatorio de DD.HH. de la Universidad) hay que aprender para no repetir. Como lo inmortalizó el cantante Horacio Guarany en Recital a la Paz, “hay que luchar porque la muerte ya no vuelva nunca más”.
Otro de los ejes de interés de La Huella es “el derecho de las personas con discapacidad y de las infancias”, como lo consignó Albornoz tras la reunión matinal.