Sonia Ocampo, referente del Centro Cultural Santiago Maldonado, analizó los números de la pobreza en la ciudad y su impacto en el territorio. «Falta un Estado más presente”, aseguró.
En las últimas horas del miércoles se tomó conocimiento de las cifras que revelan la realidad de la pobreza e indigencia en el Gran Río Cuarto, números que reflejaron una suba en los índices mencionados y en la cantidad de personas que atraviesan esa situación.
En el marco de ese diagnóstico, CÓRDOBA HOY dialogó con la referente social del Centro Cultural Santiago Maldonado, Sonia Ocampo, para conocer el camino hacia esas cifras y la realidad de las barriadas que integran el triste número de los casi 80 mil riocuartenses en la pobreza e indigencia.
En primer lugar, la dirigente criticó la lectura positiva realizada desde algunos sectores cercanos al Gobierno Nacional, quienes insistieron en promocionar el informe del INDEC como un «dato positivo» (por la caída de la pobreza a nivel nacional).
En ese sentido, Ocampo manifestó: “En el interior cada vez hay más asentamientos y problemáticas vinculadas a la pobreza, por lo que la estadística positiva que quieren destacar cuando hablan de que bajó la pobreza solo aplica a algunas regiones en concreto”.
“Si se contrastan los datos positivos con la realidad, terminan siendo irreales. Lo vemos a diario al aumento de la pobreza y la falta de políticas serias para paliar esa realidad de falta de recursos, trabajos, salud, vivienda y educación”, agregó.
Estado ausente
En cuanto a la situación local, la dirigente manifestó su preocupación por la falta de políticas estatales que ayuden a paliar la situación de los miles de pobres e indigentes riocuartenses y aseguró que “hay menos presencia del Estado en los barrios más necesitados”.
“Parece que la obra pública es lo más importante, cuando los servicios básicos escasean en muchos sectores. Las obras son importantes, pero hoy se necesitan más políticas sociales. Pareciera que se han olvidado del territorio.”, lanzó.
Sobre el impacto de la pandemia en la vida de las barriadas populares, Ocampo señaló que las ayudas proporcionadas por el Estado nacional, con políticas como la del IFE, “dejaron afuera a mucha gente”.
La referente del C. C. Santiago Maldonado relató que el trabajo territorial que llevan a cabo en algunos de los sectores más empobrecidos de la ciudad les permite concluir que cada vez hay más necesidades y menos ayudas, algo que podría recrudecer durante la llegada del invierno.
“Se ve mucha decepción de la gente ante las acciones políticas serias, mucho abandono y la falta de un Estado más presente. La gente sabe que cada vez le cuesta más acceder a los derechos básicos, ya ni hablamos de crecer económicamente”, analizó.
En ese sentido, relató que los sectores más pobres de la ciudad “se sostienen con sus redes, sus vínculos y progresan por su propia autonomía”, haciendo referencia al trabajo en comunidad y la mencionada falta de acción del Estado. “La gente tiene que autogenera las soluciones a sus problemas”, concluyó.