Una encuesta del INDEC además reveló que solo un 13% espera aumentar su producción en el corto plazo. La demanda interna y la invasión de productos importados están en el ojo de la tormenta.
La última Encuesta de Tendencia de Negocios del INDEC muestra un escenario de escasas expectativas de crecimiento en la industria argentina. Solo un 13,3% de las empresas prevé aumentar su producción en los próximos meses, mientras que el 64% cree que su nivel de actividad se mantendrá igual y un 22,5% anticipa una caída. Los datos surgen de una consulta mensual realizada a directivos y responsables de firmas del sector manufacturero, uno de los motores principales para la generación de empleo formal en el país.
El relevamiento señala que la preocupación central está puesta en el consumo interno. Más del 50% de las empresas considera que la demanda insuficiente es el principal obstáculo para incrementar su producción. En segundo lugar aparece la competencia de productos importados, mencionada por un 10,6% de las firmas. Otro 8,8% identifica a la incertidumbre política como un factor que condiciona la actividad.
Estos resultados contrastan con el mensaje del gobierno nacional, que tras las elecciones de medio término insistió en la necesidad de avanzar con reformas laboral y tributaria para impulsar el crecimiento económico. Pero, según los datos del INDEC, los problemas que hoy más afectan a la industria están ligados sobre todo al nivel de ventas y al comportamiento del mercado interno.
En cuanto al empleo, el panorama también es de cautela. Solo un 3,4% de las empresas prevé incorporar personal en el corto plazo, mientras que un 16,5% anticipa una reducción de su planta. La gran mayoría, el 80,1%, no espera cambios en su dotación de trabajadores.
El informe revela así un escenario dominado por la estabilidad sin crecimiento, donde la industria mantiene su actividad pero con señales de alerta vinculadas al consumo, la competencia externa y la incertidumbre económica general.

