Bajo el lema “Frente al odio y la violencia, más orgullo y unidad”, más de 60 organizaciones sociales marcharon desde Plaza de Mayo hasta el Congreso Nacional para reclamar derechos y visibilizar las demandas del colectivo LGBTIQ+.
Este sábado, la ciudad de Buenos Aires fue escenario de la 34º Marcha del Orgullo LGBTIQ+, una de las movilizaciones más multitudinarias del año. Con el lema “Frente al odio y la violencia, más orgullo y unidad”, más de 60 organizaciones sociales, culturales y políticas convocaron a miles de personas que se concentraron en Plaza de Mayo y marcharon hacia el Congreso Nacional.
Entre los principales reclamos del colectivo, se destacaron el respeto a las infancias y adolescencias trans, el acceso a tratamientos hormonales y la derogación de los decretos 61 y 62/2025, considerados regresivos en materia de derechos. Además, se insistió en la reparación histórica para las personas travestis y trans adultas mayores que sobrevivieron a la persecución estatal durante décadas.
Durante la jornada, la plaza se llenó de color, música y expresiones artísticas. Hubo ferias de emprendedores, shows en vivo y actividades culturales que acompañaron la manifestación, consolidando el evento como un espacio de encuentro, memoria y celebración de la diversidad.
En un documento difundido por la Comisión Organizadora, Línea Histórica, se expresó que “el Orgullo vence cada vez que asumimos nuestras identidades y rechazamos el mandato de la vergüenza”, en alusión a la importancia de la visibilidad y la lucha colectiva frente a los discursos de odio.
Esta edición de la Marcha del Orgullo fue la segunda gran movilización del año para el colectivo LGBTIQ+, tras la Marcha Federal del Orgullo Antifascista y Antirracista realizada el 1 de febrero, en repudio al discurso del presidente Javier Milei en el Foro de Davos.
La Marcha del Orgullo se celebra cada año en Argentina desde 1992 y se ha convertido en una cita emblemática para la defensa de los derechos humanos, la igualdad y la diversidad sexual.


