El presidente adelantó que primero impulsará cambios en impuestos y trabajo, y luego en el sistema previsional, buscando acuerdos con el Congreso y los gobernadores.
El presidente Javier Milei aseguró que su gobierno buscará consensos para implementar reformas estructurales en el país, priorizando primero los cambios en materia laboral e impositiva, y posteriormente en el sistema previsional.
En el ámbito tributario, Milei adelantó un plan que contempla la reducción de alícuotas de 20 impuestos y la expansión de la base imponible, con el objetivo de disminuir la evasión y liberar recursos al sector privado. Según explicó, de mantenerse la estrategia fiscal diseñada por el ministro Caputo, se estarían devolviendo a los argentinos hasta 500 mil millones de dólares hacia 2031.
Sobre la reforma previsional, el mandatario enfatizó que solo podrá abordarse seriamente una vez recompuesto el mercado laboral, y calificó el régimen vigente como “anacrónico”. La modernización laboral busca dar flexibilidad a quienes se desempeñan en el sector informal, permitiendo que puedan formalizar sus contratos sin afectar los derechos de los trabajadores actuales. Según Milei, esto permitiría duplicar la cantidad de trabajadores aportantes y mejorar los ingresos disponibles para el sistema previsional.
El jefe de Estado reconoció la necesidad de diálogo con el Congreso y los gobernadores para concretar estas medidas. “Tenemos los borradores de todas las reformas y necesitamos sentarnos con un nuevo Congreso y buscar los acuerdos para salir adelante”, indicó, subrayando que cuenta con una base de apoyo amplia: “dos tercios de los argentinos quieren esto”. Las propuestas, según Milei, se enmarcan dentro del Pacto de Mayo y ya vienen siendo debatidas en reuniones previas con autoridades provinciales.


