La entidad ruralista cuestionó el restablecimiento del esquema impositivo para soja y maíz, alertó sobre la pérdida de rentabilidad de los productores y pidió avanzar hacia un sistema fiscal más equitativo y competitivo.
La Sociedad Rural de Río Cuarto expresó un enérgico rechazo a la decisión del Gobierno Nacional de restablecer, a partir de este mes, el esquema de derechos de exportación vigente hasta diciembre de 2024 para la soja, sus derivados y el maíz. La entidad agropecuaria advirtió sobre las consecuencias negativas que esta medida tendrá sobre la producción, especialmente en aquellas regiones más alejadas de los puertos y con menores niveles de productividad.
“Se necesita una salida con más productores y más producción, no con más impuestos”, declaró Heraldo Moyetta, presidente de la institución, quien cuestionó la medida por considerarla “poco acertada desde el punto de vista de la producción agropecuaria”. Moyetta recordó que el propio presidente de la Nación ha reconocido públicamente que las retenciones son un “impuesto distorsivo”.
En ese sentido, el dirigente advirtió que, mientras no se reformule la matriz impositiva, las retenciones seguirán siendo una herramienta clave para el equilibrio fiscal, “pero eso pone en riesgo la rentabilidad del productor y atenta contra su continuidad”, fomentando además la concentración de tierras y debilitando el entramado productivo nacional.
La entidad ruralista también manifestó su preocupación por el contexto internacional. “Los precios actuales de los commodities, como la soja y el maíz, se encuentran en niveles bajos, lo que hace aún más difícil sostener la actividad con esta carga impositiva adicional”, remarcaron. Según un informe de la Bolsa de Comercio de Córdoba, los productores de soja perderían entre 50 y 110 dólares por tonelada, y los de maíz hasta 30 dólares, dependiendo de la localización y escala.
Moyetta fue enfático al señalar que “toda intervención del mercado, desde la creación misma de las retenciones, ha perjudicado históricamente a los productores” y sostuvo la necesidad de una reforma tributaria integral que elimine gradualmente este tipo de gravámenes.
“La presión fiscal sobre quienes producen, comercian o industrializan en la Argentina es muy alta. Somos poco competitivos y eso también genera preocupación ante las importaciones”, subrayó el presidente de la Rural.
El comunicado también valoró que algunos gobernadores comiencen a manifestarse contra las retenciones, al considerar que estos fondos “se desvían de sus provincias”. Sin embargo, Moyetta lamentó que estas voces no se hayan escuchado antes. “Esta transferencia de recursos históricamente ha perjudicado a las economías regionales”, remarcó.
Finalmente, desde la Sociedad Rural de Río Cuarto insistieron en que una verdadera solución solo será posible con una reforma impositiva equitativa, consensuada en el Congreso, que fomente la producción formal, la competitividad y combata la informalidad económica.
